CSIF hace un llamamiento a la movilización este martes en Málaga para defender el empleo en Unicaja Banco y contra los despidos masivos en la entidad, convocada junto a CIC (SUMA + T/STC/SIBANK) y UGT. Esta entidad financiera tiene una gran expansión en la provincia de Córdoba al contar actualmente con 22 oficinas repartidas en 15 municipios (la capital, Aguilar de la Frontera, Baena, Benamejí, Cabra, La Carlota, Fernán Núñez, Fuente Palmera, Lucena, Montilla, Montoro, Palma del Río, Priego de Córdoba, Puente Genil y Rute).
De este modo, la totalidad de la representación sindical de Unicaja Banco abrirá en la capital malagueña el calendario de movilizaciones pactado contra el ajuste que afectará a un total de 1.513 trabajadores (13 de ellos en sus sucursales ubicadas en Córdoba) y después de que la empresa no haya mostrado ninguna voluntad negociadora, según explica el Sector de Empresa Privada de CSIF Córdoba.
Asimismo, la central sindical rechaza medidas traumáticas y considera un “despropósito” el planteamiento de la empresa, “máxime cuando hemos conocido que tras la fusión con Liberbank, Unicaja Banco ha obtenido un beneficio neto de 1.395 millones de euros hasta el pasado septiembre, 12 veces más que en el mismo periodo de 2020”, subraya.
CSIF exige que todo el proceso sea voluntario y lamenta que, “hasta el momento, la dirección de la entidad no haya afrontado las negociaciones con respeto y responsabilidad hacia una plantilla profesional que lleva años trabajando y sacrificándose, incluso en épocas de crisis económica y pandemia”, destaca el sindicato. Tras su fusión con Liberbank, el nuevo Unicaja Banco anunció el mes pasado a los sindicatos un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará al 15 por ciento de la plantilla y supondrá el cierre de 395 sucursales, un 28 por ciento de su red.
Para CSIF, los cierres de oficinas no están justificados y crean problemas a la población sobre todo a las personas de mayor edad, que cada vez ven mayores dificultades en el acceso a su caja de toda la vida”. En este sentido, la central sindical exige a la empresa que calcule el impacto social de la medida y valore la fidelidad de sus clientes, sobre todo en el ámbito rural.
El calendario de movilizaciones arranca mañana martes con la movilización de Málaga, a la que seguirán otras el 23 de noviembre y el 1 de diciembre, mientras que además se han convocado dos jornadas de huelga: los días 26 de noviembre y 1 de diciembre. Para CSIF constituyen líneas rojas infranqueables la voluntariedad en las salidas, así como el rechazo absoluto a medidas impuestas de forma unilateral por la empresa. Igualmente, expresa su repulsa ante cualquier discriminación por edad y territorio a la hora de poder acogerse a extinciones de contratos y aboga por la implantación de condiciones dignas ante casos de movilidad geográfica o bajas en la empresa.
