Esto podría ser una segunda parte del artículo «pre elecciones» de «los pactos del día 29», que tampoco ha envejecido tan mal. Y el título serían las 4 definiciones que a bote pronto pueden venir a la cabeza aterrizando un poco el resultado de las elecciones del 23M: una victoria por primera vez del PP en Puente Genil, una bajada esperada, pero conteniendo la caída por parte del PSOE, un resultado cruel para una fuerza que ha hecho un intenso trabajo de oposición como IU y una sorpresa inesperada para muchos, como ha sido la irrupción de VOX.

Unos resultados buenos de participación que arrojaron una victoria popular con 10 de los 14 colegios electorales «pintados de azul», logrando los socialistas mantener la mayor representación en 4 de sus «feudos» tradicionales: Colegio Enrique Asensi, Colegio Ramón y Cajal, Colegio Rafael Chacón (El Palomar) y Colegio Miragenil.

Para hacer gobierno, las posibilidades son solo dos, pero con variantes (recordemos que la mayoría absoluta son 11 concejales): gobierno de Sergio Velasco en mayoría simple con 9 concejales como la fuerza más votada o gobierno de Esteban y Suda, con 7+4=11 . La suma de Sergio con Toñi (9+1=10), dado que no llegarían a mayoría, no es relevante.

En las declaraciones de la noche electoral, en caliente, ya se dejaron ver las intenciones con las que a priori, parten las 3 fuerzas en liza para esta negociación:

• Sergio recordaba por un lado el voto del cambio, liderado por él y por otro, que tanto IU como el PSOE habían gobernado en minoría con unos resultados similares o inferiores a los suyos, con IU en 2007, en la última legislatura de Manolo Baena, con 8 concejales y solo dos votos por encima del PSOE, cuando la suma con el PP les daba para gobernar; y con el PSOE en 2011 en la primera legislatura de Esteban Morales, también con 9 concejales, donde igualmente la suma de IU y PP, daban para crear un gobierno.
• Esteban apelaba a una confianza aún no perdida por parte de los ciudadanos y una suma de fuerzas de izquierdas que, aunque con una sensible bajada de apoyos municipales, seguía resultando suficiente para conseguir una mayoría absoluta y continuar gobernando el Ayuntamiento de Puente Genil con unas políticas de izquierda.
• Suda hablaba de programa sobre la mesa para negociar cualquier cosa, haciendo referencia a que seguían creyendo en él y su compromiso con los ciudadanos de ejecutarlo y que cualquier alternativa de gobierno pasaba por ellos, tanto con un pacto para apoyar la continuación del gobierno de Esteban, como con un «auto voto» en la investidura.

Y ahora… 

Pues ahora toca negociar y ver qué se pide a cambio de qué, posibles líneas infranqueables o simplemente imposiciones que aceptar o ante las que plantarse… o por qué no, leer en segunda o tercera derivada lo que sucedería en caso de una u otra opción:

Gobierno de Sergio en mayoría simple

Para que eso se de, en la investidura, debe ser la fuerza más votada aunque sea en mayoría simple, es decir: Sergio y sus concejales se votarían a sí mismos y tanto Esteban como Suda harían lo propio con los suyos, entendiendo que Toñi haría igualmente lo mismo.

Esto dejaría a Sergio al frente del Ayuntamiento, con Javier Villafranca, Tatiana Pozo, María Delgado, Rafael Morales, Joaquín Reina, Asun César, Rafael Ruiz y Almudena Bascón como concejales de gobierno, pero teniendo que negociar y pactar tanto los grandes acuerdos, como los presupuestos municipales, como las medidas y mociones que lleven a pleno. Daría como resultado un gobierno muy matizado por los programas y medidas que IU o PSOE apoyaran, lo que llevaría a la aprobación de parte de las medidas o propuestas con las que partían en las elecciones y que no permitirían al PP sacar adelante medidas propias que no tuvieran un apoyo de una de las dos fuerzas.       

Un gobierno con un bloque sólido, pero unos números muy justos, que obligaría a tener una permanente negociación con el resto de grupos y a desarrollar una gran habilidad de acuerdo.

Gobierno de Esteban y Suda

Un gobierno estable e inestable a la vez, con una mayoría absoluta de concejales pero con un pacto difícil, donde Esteban y Suda contarían respectivamente con Ana Carillo, José Antonio Gómez, Sonia Arjona, Jesús López, Loli Franco y Álvaro Ruiz en el PSOE y Reyes Estrada, Virginia Bedmar y Paco García de IU como concejales de gobierno. Poniendo de acuerdo las políticas que continuaría llevando el actual equipo de gobierno, con las propuestas programáticas de IU.

La parte inestable de esta posibilidad, no estaría en los números, que darían para una mayoría absoluta, sino que sería la propia integridad estructural de ese posible «11 titular». Un equipo obligando a trabajar codo con codo a personas e ideas que aunque por teórica «afinidad crómatica» estarían próximos, en la labor de oposición ejercida por IU en las últimas legislaturas y por qué no decirlo, en las propuestas y responsabilidades de la última campaña electoral, parecen ser difíciles de sentar bajo el paraguas de un gobierno de Esteban y Suda.

Sea cualquiera de las dos opciones, la pelota parece estar en el tejado de Suda, que debe tener en cuenta que de escoger votarse a sí mismo dejar gobernar a la fuerza más votada, deberá hacer una oposición dura, pero que le permita alcanzar acuerdos e imponer parte de su programa a cambio de estos… Y si pacta con el Esteban, deberá cuidar que lo le ocurra lo que en no pocas ocasiones ha sucedido con pactos de gobierno bicolor, que la fuerza con menor representación acaba siendo fagocitada por quien lidera la coalición, como el caso de ciudadanos con el PSOE en Puente Genil o la propia IU con el PP en Herrera.

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