El pasado domingo 30 de junio, el Club Ciclista Puente Genil llevó a cabo su tradicional subida al Pico Veleta, una actividad enmarcada en la decimotercera edición del RAI. La jornada estuvo marcada por el esfuerzo, la camaradería y la pasión por el ciclismo en el incomparable escenario de Sierra Nevada.
Madrugón y preparativos
El día comenzó temprano, con el punto de encuentro fijado en el Lidl a las 5:45. Puntuales como siempre, los ciclistas cargaron sus bicicletas y emprendieron el viaje hacia Granada a las 6:15. Durante el trayecto, se realizó una parada para desayunar en la gasolinera habitual, donde los bocadillos preparados en casa sirvieron como energía para afrontar el desafiante reto que les esperaba.
Salida desde Pinos Genil
A las 8:30, ya en Pinos Genil, el grupo se reunió para la tradicional foto grupal antes de iniciar la ruta. Con las bicicletas listas y los ánimos en alto, cada ciclista comenzó el ascenso al Pico Veleta a su propio ritmo, siguiendo el lema no oficial de la jornada: “Cada perrito se lame su .”
Aunque el ascenso es un viejo conocido para el Club, nunca deja de ser desafiante. Para apoyar a los ciclistas, la organización dispuso un punto de avituallamiento en El Dornajo, donde Cristóbal y la furgoneta del club estuvieron presentes para proporcionar líquidos. Los participantes pudieron elegir entre las rutas por El Duque o por la carretera Nacional, combinando opciones para enriquecer la experiencia.
Desafíos y metas en la cima
La diversidad de objetivos entre los ciclistas fue evidente. Algunos optaron por culminar en Pradollano, mientras que otros llegaron a la Hoya de la Mora, la barrera o incluso se aventuraron más arriba, alcanzando puntos cercanos al Veleta. A pesar de los diferentes niveles de exigencia, el espíritu de equipo prevaleció, asegurándose de que todos estuvieran de vuelta en Pinos Genil a las 13:00.
Comida y regreso
De vuelta en Pinos Genil, las bicicletas se guardaron y los ciclistas se dirigieron al Bar Guillermo, junto al río, para disfrutar de una merecida comida en grupo. Anécdotas, bromas y risas se mezclaron con la elección práctica de la modalidad de pago, reflejando el espíritu informal y amistoso del Club. Tras el almuerzo, el grupo emprendió el regreso a Puente Genil con el objetivo cumplido y la satisfacción reflejada en los rostros.
Reflexión final
Un año más, el RAI XIII superó las expectativas: esfuerzo, compañerismo y diversión a partes iguales. Como en el ciclismo y en la vida, la clave está en disfrutar sufriendo, y esta ocasión no fue la excepción. ¡Hasta el próximo reto, compañeros!
«El Club Ciclista Puente Genil ha recibido una ayuda de la Diputación Provincial de Córdoba dentro de la Convocatoria de subvenciones convocatoria a entidades deportivas de la provincia de córdoba para la realización de actividades deportivas y al apoyo al deporte base, durante el año 2024, para la ejecución del Proyecto/actividad Actividades deportivas del Club Ciclista Puente Genil