Declaración realizada hoy a las 12:00 en una intervención en el Ayuntamiento de Puente Genil de manera conjunta con Esteban Morales Sánchez, Alcalde de Puente Genil.
Transcribimos las declaraciones de Jesús Gálvez Silva, Presidente de la Agrupación de Cofradías, Hermandades y Corporaciones Bíblicas.
«Buenas tardes,
El pasado sábado 14 de marzo la Junta Directiva de la Agrupación de Cofradías, Hermandades y Corporaciones Bíblicas, reunida de manera telemática con carácter extraordinario, y contando con el alcalde la villa D. Esteban Morales Sánchez y el Consiliario de la Agrupación D. José Manuel Gordillo Márquez, aprobó suspender la celebración de las procesiones y cualesquiera actos de nuestra Semana Santa organizados por esta Agrupación.
Hemos entendido como absolutamente necesaria la adopción de esta medida lo antes posible, dado el estado de la pandemia y la declaración del estado de alarma en toda España. Pretendemos con ello contribuir a la clarificación de la situación en la que nos encontramos, a partir de la cual nuestros asociados, en el seno de sus respectivas cofradías y corporaciones, deberán adoptar las decisiones estratégicas y de planificación que estimen necesarias.
Es una decisión que ojalá no hubiésemos tenido que tomar nunca, pero la Semana Santa nos puso al frente de esta Agrupación, precisamente, para tomar decisiones cuando fuera necesario. Creemos que de esta manera cumplimos no sólo las disposiciones legales, sino que contribuimos a mandar un mensaje de lo que nos corresponde individual y colectivamente, en nuestra condición de ciudadanos. Es nuestra obligación ayudar en la medida de lo posible, y siguiendo las indicaciones sanitarias, a contener la expansión del virus por el bien de todos, pero sobre todo por la salud de niños y mayores. Es una decisión muy dura y muy dolorosa para todos nosotros, no sólo para quienes hemos tenido que adoptarla, sino para todo el mundo de la Semana Santa. Somos conscientes, además, de que esto es algo que no sólo afecta a los partícipes de una fe y unas tradiciones, sino al mismo tiempo a agentes y operadores económicos. Es una decisión que prácticamente la teníamos asumida el pasado viernes, pero la declaración del estado de alarma al día siguiente sábado, la convertía en algo ya inevitable.
De todas maneras, no hemos suprimido nuestra Semana Santa, sino la estación de Penitencia de nuestras Cofradías, Hermandades y Corporaciones Bíblicas. Los cristianos (hombres y mujeres de Puente Genil), viviremos una Semana Santa muy diferente. Cada uno lo hará a su manera, seguro que de forma muy íntima y personal. Traeremos a nuestra mente imágenes de otras Semanas Santas, nos consolaremos entonando cánticos y saetas en el interior de nuestros hogares, y rescataremos discos y grabaciones para que sus sonidos llenen por completo nuestro espacio vital.
Al mismo tiempo os pido a todos los que participamos de esta fe, que recemos, que demos gracias a Dios por tantas gracias recibidas y pidaámosle por la salud de los nuestros.
Colocad en balcones y ventanas las lucecitas de la Purísima, como siempre hacemos para consagrarnos a María; leed el Evangelio, acudid a él, pues ahí están las respuestas; sacad las colgaduras de Pasión y engalanad con ellas vuestros hogares; llamad cada día a vuestros amigos y familiares; démonos ánimos unos a otros; reforcemos la familia ahora que tenemos la oportunidad de vivir y convivir sin prisas ni urgencias. Participemos en las misas, en los rezos y rosarios que nuestras parroquias y cofradías están organizando a través de internet.
Quiero agradecer a todas las Cofradías, Hermandades y
Corporaciones la respuesta leal y responsable que han dado frente a esta
situación inesperada. Su compromiso y generosidad es ahora más necesaria y más
evidente que nunca. Ya estamos recibiendo comunicaciones de nuestros asociados,
solicitando y comprometiéndose frente una causa solidaria que, sin duda alguna,
pondremos en marcha cuando todo esto pase. Las cofradías y las corporaciones
están siendo, una vez más, el ejemplo que siempre han sido.
Ruego a Jesús Nazareno y a Nuestra Madre la Purísima Concepción, que cuiden y bendigan a nuestro pueblo y a toda España, para que este virus dure el menos tiempo posible.
El 2021 traerá sin duna una nueva Semana Santa. En ella recuperaremos todos los besos y abrazos que nos hemos guardado, y nos afianzaremos en una fe y unas tradiciones frente a las que ningún virus tendrá jamás la más mínima posibilidad de victoria.
Muchas gracias»