La empresa municipal Egemasa iniciará la próxima semana un plan para la recogida de naranjas que se encuentran en calles, plazas, parques, colegios y edificios de titularidad pública del municipio para evitar en la mayor medida posible la caída del fruto a la vía pública, reduciendo de esta forma la limpieza de la misma y posibles accidentes que puedan ocasionar a los viandantes. Para ello, contará con un jardinero que forma parte del personal de la plantilla y con cuatro peones de jardines que serán contratados de la bolsa de trabajo para la ejecución de este plan.

Esta acción, aparte de mejorar la estética de la localidad y de limpiar los árboles y la vía pública, permitirá que durante los meses de marzo y abril se llenen las calles de la floración y del aroma de azahar. La recogida de naranjas en el mes de enero reduce el riesgo de dañar las ramas de los árboles, dado que es el mes en que el fruto se encuentra en su punto de maduración, facilitando al operario sus labores de recolección. Además, la actuación mejora el estado fitosanitario de los árboles aumentando su floración, y así su fragancia en los meses de primavera, la cual suele acompañar a la Semana Santa.

El número de ejemplares de naranjos a recolectar asciende a 1.500 árboles, de los que se estima recoger unos 40.000 kilos.