El Pleno de la Corporación Municipal ha aprobado la propuesta presentada por el alcalde para activar la prórroga obligatoria del contrato de gestión del servicio público de abastecimiento, saneamiento y depuración de aguas formalizado con FCC-Aqualia S.A., una decisión que se adopta a escasamente 20 días de que venza la concesión, y como medida provisional –únicamente puede extenderse por un periodo máximo de seis meses- a la espera de que el Ayuntamiento reciba el informe encargado a una consultora externa en el que se evaluarán las diferentes opciones sobre la futura gestión del servicio, aunque tal y como se ha venido defendiendo desde el equipo de Gobierno la intención es que sea la empresa provincial Emproacsa, la que se haga cargo del mismo en detrimento de Aqualia, que también opta a seguir siendo la concesionaria, y que ha anunciado que demandará al Consistorio en caso de no continuar prestando el servicio, alegando que el Ayuntamiento no le comunicó con la antelación suficiente la finalización del contrato, dándose así una “prórroga tácita” del mismo, algo que el alcalde considera que no se ajusta al marco legal actual.
En este contexto, el alcalde aprovechó su turno de palabra en el Pleno para indicar que a día de hoy “no tenemos la memoria que determine el modo de gestión, de tal forma que para elegirlo, con suficiente tranquilidad y visto que el 18 de diciembre acaba el contrato actual, usamos esa cláusula obligatoria”. Morales dijo que el Ayuntamiento contrató a la consultora el pasado mayo con un tiempo de 3 meses para acabar ese documento, “pero la obstrucción a la hora de facilitar la información por la concesionaria, en este tema y en todas las solicitudes de información realizada en estos años, ha hecho que la propia consultora tuviera que pedir otra prórroga para finalizar los trabajos con la información precisa., aunque nos dicen que esta semana estará acabada”.
Durante el debate, Jesús David Sánchez (IU) anunció la abstención de su grupo afeando al alcalde que hablara de tomar una decisión con tranquilidad, “cuando desde 2013 sabíamos que en 2021 acababa la concesión, con lo cual las cosas se tenían que haber hecho con la suficiente antelación”. “Esta es una decisión extraordinaria que tomamos forzados, de manera obligatoria, para que se siga prestando el servicio”, dijo Sánchez, quien acusó al equipo de Gobierno de haber hecho las cosas “mal y tarde”, incumpliendo sus compromisos, ya que ustedes defendieron la gestión municipal del agua, dar participación a los ciudadanos sobre este tema e incluso prometieron crear una mesa técnica sobre el mejor modelo de gestión”. “Esto justifica nuestra desconfianza en ustedes, motivado más si cabe en un asunto importante en un servicio básico para la ciudadanía, por eso, porque no son políticos de fiar, nos vamos a abstener”.
Por su parte, Sergio Velasco (PP) dijo que su grupo votaría a favor de la prórroga “porque no queda más remedio». «Las cosas no se han hecho ni con tiempo ni antelación, sino varios meses antes en un asunto que se debe tratar con la seriedad que tiene la gestión del ciclo integral del agua, que es la competencia más importante de un Ayuntamiento”, afirmó Velasco, quien puso de manifiesto que “parece que aquí el malo de la película es Aqualia, y de hecho se le acusa de obstrucción de información, cuando ellos dicen que han presentado toda la información”. “Estamos haciendo un ridículo municipal y de toda la provincia, ya que todo el foco está aquí puesto con el tema del agua, dándose aplazamientos y tumbos porque parece que no se concretan las cosas. Es bastante triste y estamos en que Aqualia es la que va a seguir prestando el servicio y es la que parece que se va a quedar cinco años”, concluyó Velasco.
Las palabras del portavoz del PP no gustaron al alcalde, que rápidamente replicó acusando a Velasco de tener instrucciones de la empresa “a cambio de alguna prebenda”, algo que motivó la reacción airada de la bancada popular solicitando al regidor que retirara sus palabras. Morales insistió en la falta de lealtad de Velasco, mientras que éste le instó a que pidiera disculpas por la gravedad en la acusación de un delito en sede plenaria. En este punto, Jesús David Sánchez afirmó que “era lamentable y grave la situación que se acababa de vivir, solicitándole al alcalde que pidiera perdón a Velasco y al pleno, algo que el alcalde finalmente hizo retractándose en sus acusaciones. “No me refería a una mejora económica para nadie, pero sí le pido que al señor Velasco que confíe más en los técnicos de Puente Genil, que en los de Aqualia, que tienen otros intereses diferentes”.
