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El Ayuntamiento trasladará de inmediato la ubicación de los comerciantes de la Plaza de Abastos, tras declararse como «obra de emergencia» la intervención en el edificio

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Los trabajos de reparación de la cubierta del Mercado de Abastos arrancarán en un mes aproximadamente, tras haber declarado el Ayuntamiento la actuación como “obra de emergencia”, lo que agilizará los trámites previos al inicio de la intervención. Así lo ha puesto de manifiesto el alcalde, Sergio Velasco, que en una visita realizada al inmueble, ha dado cuenta del precario estado de la cubierta, lo que supone un riesgo importante que obliga a actuar de inmediato. El regidor explicó que tras recibir las quejas de los placeros por las goteras existentes, se hizo un estudio en profundidad que reveló el deplorable estado de la cubierta, “algo que no se había tenido en cuenta a la hora de proyectar la obra de remodelación del edificio”. Ante esta situación, el Ayuntamiento ha optado por apuntalar el edificio para prevenir un posible desplome y, paralelamente, declarar la emergencia de las obras para que la ejecución de la misma sea compatible con la que inicialmente estaba proyectada.

El efecto inmediato que tiene esta medida es trasladar de inmediato la ubicación de los placeros, que pasarán a establecerse en el local del antiguo Supermercado Día, en la calle Cruz del Estudiante, un espacio de unos 500 metros cuadrados, que se ha habilitado tras las conversaciones mantenidas entre el Ayuntamiento y el propietario. De esta forma, en apenas 15 días se llevará a cabo la mudanza de estos comerciantes, que permanecerán en dicho local unos seis meses, tiempo calculado para la ejecución de las obras.

Velasco mostró su receptividad hacia los comerciantes, indicando que durante la obra se acometerá cualquier modificación o aspecto relativo a la misma para conseguir una mayor comodidad de estos profesionales. “Cualquier actuación de este tipo debe llevarse a cabo desde el ámbito del diálogo, la transparencia y la cercanía con los afectados”, indicó. 

     

La obra prevista aumenta así su presupuesto, ya que a los 940.000 euros inicialmente contemplados para el desarrollo de actuaciones de modernización del edificio, sufragados en un 80% aproximadamente por la UE a través de los fondos Next Generation, y que incluían la apertura de un espacio gastronómico en su interior, se le añade una cantidad que superará los 300.000 euros para la reparación de la cubierta, “por lo que el montante se situará en torno a los 1,3 o 1,4 millones de euros”. El alcalde se mostró confiado en que los trabajos concluyan pasada la Semana Santa de 2024, dado que tras la prórroga solicitada en la ejecución, el margen para poder contar con los fondos europeos culmina el 30 de junio de 2024.

Por último, y en relación con las demandas de aparcamiento de los placeros, el alcalde puso de manifiesto que una de las posibilidades radica en aprovechar la zona de aparcamiento que actualmente hace las veces de  parada de taxis en la calle San Cristóbal, en cuyo caso los taxistas pasarían a la zona del Parque de Los Pinos aledaña al antiguo cuartel de la Guardia Civil, donde se estacionaban los vehículos oficiales de los agentes, aunque precisó que todavía no se ha tomado una decisión definitiva al respecto.

 

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