La gerencia del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha remitido una circular a todos sus profesionales sanitarios y no sanitarios en las que se le prohíbe comunicar datos de pacientes con coronavirus. En el documento, firmado por el director gerente, Miguel Ángel Guzmán, el SAS alerta de que el ordenamiento jurídico establece como ilícitos penales el descubrimiento y la revelación de secretos, fijando como agravante que la vulneración de la intimidad se produzca por trabajadores públicos.
La gerencia andaluza también recuerda que la situación originada por el coronavirus ha sido calificada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como pandemia internacional, creando «una crisis sin precedentes en el siglo XXI y de enorme repercusión para la vida de los ciudadanos». A esto, «se unen la inmediatez con que se demanda la información y la celeridad en su transmisión por el uso de las redes sociales».
La misiva recuerda que en la actual situación de estado de alarma decretado por el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19, por el Ministerio de Sanidad se ha promulgado la Orden SND/234/2020, de 15 de marzo, sobre adopción de disposiciones y medidas de contención y remisión de información al Ministerio de Sanidad ante la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19, que reserva al Gobierno de la Nación la facultad de hacer pública la información epidemiológica, la relativa a la situación de la capacidad asistencial, la relacionada con las necesidades de recursos materiales y con los recursos humanos.
“Por todo ello, se les recuerda a todos los/as profesionales del Servicio Andaluz de Salud la obligación que tienen de guardar secreto sobre cualquier información a la que accedan, en el ejercicio de su actividad profesional, relativa a pacientes afectados por el coronavirus COVID-19, así como sobre aquellas materias que han sido reservadas, reglamentariamente, al ámbito del Ministerio de Sanidad”, concluye.