Los que me conocen pueden dar fe de mi pasión por el deporte. Sea como espectador o como practicante de cualquier disciplina. Ahora me ha dado como a muchos por recuperar la pasión por el running. Pero antes he probado el gusanillo del fútbol – quién no ha aprendido en Puente Genil a controlar el balón y a dar pases con Tato como maestro -, el baloncesto, el balonmano, la petanca, y el hockey. Precisamente es en el deporte del stick donde más arraigado me sentí para querer formar parte de un vestuario. Donde hice de un club mi familia y donde quise adquirir unos valores que no cambio por nada. Y sí, hablo de un deporte minoritario.
A estos deportes – de los cuales sólo nos acordamos siendo realistas cuando estamos ante un año olímpico y los españoles ganan medallas – el Ayuntamiento de Puente Genil quiere darles su sitio mediante la gala de premios Foro Deporte. Una iniciativa que personalmente aplaudo pero que, indudablemente, genera un interesante debate. Acumula tres ediciones y he asistido a dos de ellas. Ambas, al igual que la de este año 2019, con un Teatro Circo en el que si se llenaba el patio de butacas, era casi milagro. Excepción merece la mención, valga la redundancia, a la promoción de profesionales de la educación física y el deporte de Puente Genil repartidos por toda España y que dieron un aspecto bien bonito al recinto municipal en 2018.
La gala, a la que cualquier persona puede asistir hasta
completar aforo de manera totalmente gratuita, es el culmen a una serie de
encuentros entre profesionales del deporte en torno a aspectos relacionados con
él como la salud, el empresarial, la cultura, o la educación (y siempre he
echado en falta alguna charla centrada en el papel de los medios de
comunicación en el deporte).
«Falta una figura de renombre en activo para relanzar el evento»
Llegado a este punto, me pregunto. ¿Usted que está leyendo esta columna conoce a Marcus Cooper, Marina Alabau, o a José Manuel Quintero? Y no. No haga ese ejercicio de buscar en San Google Bendito quiénes son. Pues los tres, al igual que Víctor Sojo, Carlos Coloma, o Maialen Chourraut, son unos campeones que cuentan con menos presencia en los medios de comunicación precisamente porque practican deportes llamados minoritarios. Y ya saben lo que interesa a los magnates de la información.
Por tanto, y ya que este evento está incluido en el presupuesto municipal – en el que los pontanenses contribuyen con buena parte de sus impuestos – podría requerir de un análisis para mejorar, cuanto menos, su repercusión más allá del ámbito local o provincial. Todo vale dinero, y en este sentido me refiero a que si Foro Deporte quiere ganar cierto peso en su espectro, debe contar con una figura de renombre en activo como premiado en la gala. Un reclamo a las masas.
La ya recargada agenda cultura y de ocio con la que cuenta Puente Genil no deja de atraer siempre al mismo público. ¿Es necesario reconocer la importante trayectoria de deportistas que practican disciplinas menos conocidas sean paralímpicos o no? Obviamente que sí. Pero ellos mismos, que ya de por sí son agradecidos con toda difusión mediática de lo que hagan, saben que necesitan de deportes más consolidados como aliados para sentirse más visibles.