ACTUALIDADBalonmanoDEPORTES

La RFEBM pregunta a los clubes si estarían dispuestos a reanudar la liga, y jugar en los meses de junio y julio

Tiempo de lectura: 2 minutos
Comparte

La indefinición y la incertidumbre siguen marcando el desenlace de las competiciones nacionales de balonmano de la presente temporada. Eso es, al menos, lo que se desprende del cuestionario que la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM) ha trasladado en las últimas horas a los clubes, un documento en el que se les plantea una serie de preguntas para saber si estarían dispuestos a jugar a puerta cerrada los partidos de la temporada que restan por disputarse, en caso de contar con todas las garantías sanitarias, y hacerlo durante los meses de junio y julio.

El organismo federativo también plantea otras preguntas, como cuál es la fecha límite para reiniciar la competición, qué clasificación se tendría en cuenta -la del final de la primera vuelta o la del momento de la suspensión- en caso de no poder reanudarse las ligas, y si establecerían alguna fórmula de competición diferente a la actual para establecer los ascensos y descensos. Además, en el documento se plantea la realización de una breve mini pretemporada previa a la reanudación de la liga, de entre diez a quince días.

El cuestionario va a acompañado de una carta, en la que el presidente de la RFEBM, Francisco Blázquez, pide a los clubes que se pronuncien utilizando la intranet federativa, con el fin de garantizar la ‘confidencialidad’ de sus opiniones. 

     

El envío de este documento ha generado bastante sorpresa entre los clubes de Asobal, muchos de los cuales se han pronunciado a favor de dar por finalizada la competición, tal y como ha ocurrido en otros países europeos, una opinión que no comparte Blázquez, quien hace unos días se mostró partidario de que haya ascensos y descensos. De hecho, la gran mayoría de los clubes, entre los que se encuentra el Ángel Ximénez-AVIA, han realizado expedientes temporales de regulación de empleo a sus plantillas, cuerpos técnicos y trabajadores. Muchos de estos clubes consideran que reanudar la competición supondría un problema económico añadido al tener que consignar un gasto con el que no se contaba inicialmente.

Asimismo, y además del problema añadido que la carga de partidos puede suponer para jugadores que actualmente llevan prácticamente un mes inactivos, está el aspecto de tener que jugar sin público en las gradas, o hacerlo en meses donde las altas temperaturas dificultan notablemente el desarrollo de entrenamientos y partidos.

¿Interesante? Compártelo

Artículos Relacionados