La Semana Santa, que normalmente todas las primaveras suele reactivar e impulsar la actividad económica en el municipio, ha cumplido sobradamente este año con las expectativas depositadas en ella, y es que la buena climatología, especialmente durante los días grandes, a partir del Jueves Santo -con unas temperaturas muy agradables e incluso muy calurosas para esta época del año- posibilitó que tanto los pontanenses como los visitantes se echaran a la calle, propiciando de esta forma el lucimiento de los desfiles procesionales y dando un gran ambiente y colorido a las principales arterias de la localidad.
Esta circunstancias también han permitido dar un importante respiro tanto el sector de la hostelería como al del comercio, que han notado la presencia masiva de público llegado de fuera de Puente Genil, y es que tras dos años de pandemia donde estos sectores se han visto muy castigados, ya se necesitaba una Semana Santa como la vivida para romper con la dinámica negativa. En líneas generales, los primeros datos apuntan a que el balance ha sido tremendamente positivo, si bien es cierto que no han trascendido cifras que permitan determinar con más detalle y exactitud cómo se ha traducido la semana en el plano estrictamente económico, a efectos de generación de riqueza para la ciudad. En todo caso, desde la Agrupación de Cofradías el mensaje general es de satisfacción por haber podido disfrutar de los desfiles procesionales sin incidencias más allá de las meteorológicas, un mensaje que se ha extendido a los trabajadores de la empresa municipal Egemasa, por la labor desempeñada durante toda la semana para mantener la ciudad lo más limpia posible pese a la numerosa presencia de público.
Del mismo modo, también ha sido una excelente semana para potenciar la imagen de la localidad, no en vano han sido numerosas las visitas a la Oficina de Turismo, a algunos de los edificios con más proyección turística de la ciudad y se han redoblado los grupos que han querido conocer el yacimiento arqueológico de Fuente-Álamo. Además, ha resultado muy significativo el incremento del turismo nacional e internacional en las procesiones del Viernes Santo y del Domingo de Resurrección, algo a lo que también han ayudado las campañas de promoción de entidades como “Caminos de Pasión”. En definitiva, la Semana Santa 2022 pasará a la historia por ser la más anhelada tras los dos años en blanco de pandemia, y por la elevadísima cifra de visitantes que la compartieron junto a los pontanenses, algo que se ha notado, y mucho, en la gran mayoría de las actividades económicas existentes en la población.