El Ministerio de Educación y la Junta de Andalucía han alcanzado este jueves un acuerdo para establecer las medidas y normas de control y seguridad para evitar contagios de Covid-19 en las aulas durante el nuevo curso escolar que arranca en septiembre.

La Junta ha apostado por la normalidad a la hora de la integración y la presencia de todos los niños en las escuelas a partir del 1 de septiembre, empezando por preescolar, que son los primeros en entrar y hasta las siguientes etapas que se irán incorporando en las semanas sucesivas, y garantizando la seguridad desde el punto de vista sanitario. Durante los primeros días de curso está previsto que se celebren unas jornadas para la formación de los estudiantes en las medidas de prevención del coronavirus y los protocolos de seguridad.

Entre las grandes novedades, en cada colegio debe haber un responsable en el manejo de covid-19, entre cuyas funciones están la comunicación y coordinación con los servicios sanitarios y la Consejería de Salud y Familias. Del mismo modo, cada centro educativo dispondrá de tomas de temperatura, dispensadores de gel hidroalcohólico para el alumnado a la entrada del centro y en las aulas, siendo el uso de las mascarillas obligatorio a partir de los seis años. 

En cuanto al distanciamiento social, y además de evitar aglomeraciones en entradas y salidas, se debe procurar mantener la distancia de al menos 1,5 metros en las interacciones entre las personas en el centro educativo. Del mismo modo, quedará prohibido acudir al centro educativo si se presenta algún síntoma compatible con covid-19. Si la detección se produce durante las clases se debe contactar de inmediato con el coordinador covid-19 del colegio. El alumno con posible covid-19 deberá llevar mascarilla y esperar a sus familiares en un espacio aparte con ventilación, con papelera de pedal con bolsa donde tirar pañuelos y mascarillas. Si el alumno no lleva mascarilla al ser de Infantil, quien le acompañe deberá ir provisto de bata desechable, mascarilla FFP2 y pantalla facial.

En educación infantil y en primer ciclo de educación primaria, la organización del alumnado se establecerá, con carácter general, en grupos de convivencia estable, en cuyo ámbito no se aplicarán criterios de limitación de distancia. Así, se deben evitar aquellas actividades que conlleven la mezcla de alumnado de diferentes grupos de convivencia o clases, así como las que exijan una especial proximidad.

Otro de los aspectos a tener en cuenta es la obligación de mantener una ventilación frecuente de los espacios, al menos durante 10-15 minutos al inicio y al final de la jornada, durante el recreo, y siempre que sea posible entre clases, manteniéndose las ventanas abiertas todo el tiempo que sea posible, y una exhaustiva limpieza del centro.

Los pupitres y sitios en el comedor deben ser fijos durante todo el año para el alumnado. En los autobuses escolares será obligatorio el uso de mascarilla a partir de 6 años de edad y recomendable en los niños de 3 a 5 años. Asimismo habrá una constante higiene de manos, estableciéndose una frecuencia de, al menos, cinco veces al día.

Protocolo frente a los brotes de covid-19 en los colegios

Si hubiese brotes controlados o casos esporádicos, se indicarán actuaciones de control específicas para cada uno de ellos mediante la implementación de las medidas de control habituales: aislamiento de los casos e identificación y cuarentena de los contactos de cada grupo o clase independiente.       

Si hubiese brotes complejos o transmisión comunitaria esporádica, se estudiarán la relación existente entre los casos y se valorará la adopción de medidas adicionales como la ampliación del grupo o grupos que debe guardar cuarentena.

Si hubiese transmisión comunitaria no controlada, será la Consejería de Salud y Familias de la Junta la que evaluará los riesgos para considerar la necesidad de escalar las medidas, valorando en última instancia, el cierre temporal del centro educativo.