Coincidiendo con el décimo aniversario de su fallecimiento, acaecido en Málaga en octubre de 2009, la editorial Penguin Random House ha recordado el legado literario del escritor pontanés Juan Campos Reina publicando, en su colección Debolsillo un estuche especial que, bajo el título “Parques cerrados”, reúne tres volúmenes: la reedición del ensayo, “De Camus a Kioto”, en el que se encontraba trabajando en la última etapa de su vida; su Poesía completa y los Diarios del Renacimiento, entre los que se incluyen testimonios vitales que el propio autor plasmó mientras trabajaba en su Trilogía del Renacimiento.
Esta obra ha sido presentada en la Biblioteca Municipal “Ricardo Molina”, en un acto presidido por el alcalde, Esteban Morales, y que contó con la presencia de la concejala de Cultura, Eva Torres, y la participación del profesor Antonio Moreno Ayora, escritor y crítico literario; y de los escritores e hijos del autor, Gonzalo y Álvaro Campos.
Juan Campos Reina (Puente Genil, 1946- Málaga, 2009) está
considerado como uno de los mejores autores andaluces del género narrativo. Entre sus obras destaca la novela Santepar (Seix
Barral), a la que siguieron varias más como “Un desierto de seda” (1990),
“Tango Rojo” (1992), “El bastón del diablo” (1996) y “La góndola negra” (2003),
obras estas tres últimas que conformaron la “Trilogía del Renacimiento”.
Posteriormente, hay que reseñar dos títulos posteriores Fuga de Orfeo y El
regreso de Orfeo, que conforman el conjunto “La cabeza de Orfeo” (2006). Además
de estas obras, Campos Reina fue autor de numerosos textos, ensayos,
narraciones cortas, poesías y artículos periodísticos. Así, en 1997 publicó un
relato breve titulado “La Rosa de Apolo” y ese mismo año recibió el Premio
Andalucía de la Crítica en la modalidad de Narrativa, en atención a los méritos
literarios y humanos de “El bastón del diablo”. Su fallecimiento provocó una
gran consternación en la cultura andaluza, rindiéndosele numerosos homenajes
especialmente en Málaga, ciudad en la que residía. Asimismo, Puente Genil, su
localidad natal, quiso tener un recuerdo especial a su figura, rotulando con su
nombre la biblioteca sucursal ubicada en la calle Juan XXIII, inaugurada en
enero de 2011, en un acto muy emotivo en el que estuvo presente toda su
familia.