La oleada de robos en los núcleos poblacionales separados del casco urbano de Puente Genil no cesa. Durante la pasada madrugada se han producido otros tres robos en naves agrícolas ubicadas en la zona de huertas de la aldea de Sotogordo y otros dos en la zona de las Bocas del Rigüelo.
Concretamente, en los tres primeros casos, los ladrones han reventado los candados de acceso a las naves, e incluso han destrozado la alarma instalada por uno de los propietarios. Los sucesos se han producido en torno a las cinco de la mañana en tres naves muy cercanas entre sí ubicadas en un radio de unos 200 metros. En alguno de estos de casos, los delincuentes se han apropiado de maquinaria eléctrica, máquinas de corte, radiales y otros utensilios, unos daños materiales cuantiosos cuyo coste económico se está evaluando. Los tres propietarios afectados se han personado en la mañana de este domingo en las dependencias de la Guardia Civil para interponer las correspondientes denuncias. También los agentes del Instituto Armado se han desplazado hasta la zona para recabar información sobre lo ocurrido y tratar de determinar el ‘modus operandi’ del autor o autores de los ilícitos.
En el caso concreto de Sotogordo se trata del quinto robo que se produce en apenas diez días, algo que no hace más que acrecentar la preocupación de los vecinos ante una oleada que ha suscitado una enorme inquietud. Los robos en Sotogordo se unen a los registrados en otras zonas como las urbanizaciones Ribera de San Luis y Cañada de la Plata, el núcleo de Majada Vieja, o la propia Ribera Baja, donde en la noche del miércoles un grupo de encapuchados asaltó una vivienda agrediendo a sus dos moradores, un hecho que provocó la indignación de los vecinos, que el viernes por la mañana protagonizaron una concentración de apoyo a las víctimas.
En el plano institucional, el Ayuntamiento ha convocado de urgencia una reunión de la Junta Local de Seguridad, que se celebrará en la mañana del martes.