La singular casa situada en la cuesta Borrego 3, una pequeña joya arquitectónica de Puente Genil construida a principios del siglo XX, desconocida para el gran público durante más de cien años, se ha convertido en uno de los edificios más visitados y admirados de la localidad tras su restauración y reconversión en la nueva sede del Restaurante ALMA de Ezequiel Montilla. Un edificio, hasta la fecha de autoría desconocida, que tras un análisis arquitectónico, histórico y sociocultural, ha sido atribuido por el arquitecto Francisco Gómez de Tejada al gran maestro de obras pontanés Rodrigo García Luque.
La casa, construida entre el año 1899 en el que adquiere el solar (existía una casa más antigua que fue demolida por completo) y 1904, año de su finalización, tal y como reza en la portada que da acceso al zaguán, fue promovida por D. Antonio Campos Sánchez, dentro de un contexto de un notable auge industrial, económico y cultural. Los años finales del siglo XIX y principios del XX, un período crucial en la historia de Puente Genil, que marcó significativamente su desarrollo y carácter.
La industrialización de Puente Genil en esta época estuvo marcada principalmente por la industria del aceite de oliva, la elaboración de la carne de membrillo (ligada a las huertas y al río) y la producción de vinos y licores. Precisamente D. Antonio Campos, provenía de una familia dedicada a los destilados natural de Rute, donde poseían una fábrica de aguardiente. Este auge industrial llevó a un crecimiento económico significativo en Puente Genil. La prosperidad de las industrias locales no solo mejoró la economía de la ciudad, sino que también atrajo a trabajadores y empresarios, fomentando así un ambiente de crecimiento y desarrollo. La expansión económica se reflejó en el crecimiento urbano y en la mejora de infraestructuras, como la construcción de vías férreas y la llegada del ferrocarril, que conectaba Puente Genil con otros importantes centros económicos y comerciales.
En el ámbito arquitectónico, este periodo fue crucial para Puente Genil. La riqueza generada por la industrialización permitió la construcción de edificaciones notables, muchas de las cuales reflejaban los estilos arquitectónicos populares de la época, como el historicismo. Este desarrollo arquitectónico se manifestó tanto en edificios públicos como privados, incluyendo viviendas, fábricas, y estructuras de servicios públicos.
El edificio objeto del estudio, situado en la Cuesta Borrego nº 3 de Puente Genil, es una casa solariega tradicional andaluza de tres plantas de altura, estructurada en torno a un patio interior al que se abren las estancias interiores de la vivienda. Originalmente el patio constaba de una galería porticada en planta baja, existente, y una en planta primera abierta sobre la planta baja y recorrida por una baranda de forja. Dicha planta fue cerrada por D. Jaime Reina en los años 60, reconstruyéndose los pórticos a modo de ventanas, por el maestro de obras D. José Rodríguez Cejas.
Destaca sobremanera el diseño del patio central, inspirado en la arquitectura islámica, con su rica paleta de colores y formas inspiradas en la naturaleza. Una expresión artística y espiritual profundamente arraigada en la historia y la cultura del mundo islámico. Esta arquitectura no es solo funcional, sino también simbólica, reflejando la cosmovisión islámica y su énfasis en la unidad, el orden y la belleza infinita. La casa, situada en esquina, abría fachada principal a la calle Borrego y secundaria a la calle Campanas, donde tenía el acceso a las estancias de servicio de la vivienda.
Un edificio de una singularidad y una relevancia únicas en la arquitectura de Puente Genil, que ha llegado a nuestros días conservando originales e intactas las principales características, sobre todo del zaguán, la entrada, la escalera y la planta baja del maravilloso patio central. Gracias a la familia Reina Campos que la ha conservado durante los años y cómo no, a su actual propietario, Ezequiel Montilla, un amante de la arquitectura quien restauró con sus propias manos la mayor parte de esta joya arquitectónica.
En la revista El Pontón, en su número 408 de julio de 2023, Luis Velasco Fernández Nieto, en su sección “Papeles y Legajos” escribe un extenso artículo hablándonos de la casa y de sus promotores, en el que podemos ampliar la información sobre la misma.
Según nos cuenta la bisnieta del promotor, Dña. María Luisa Reina Campos, a través de relatos familiares que han pasado de padres a hijos, la casa se inspiró en el patio del Palacio de Medinaceli de Sevilla. Así lo atestigua un grabado perteneciente a la familia, que hoy se encuentra en la entrada del restaurante ALMA.
OBJETIVO Y MÉTODO DEL ESTUDIO
Con el presente artículo de investigación, su autor quería demostrar la autoría del edificio, hasta ahora desconocida, pensándose siempre que el autor de tal diseño debería ser un arquitecto de fuera de Puente Genil. Mediante la metodología del análisis comparativo, intentaremos demostrar la semejanza en estilo arquitectónico, técnicas de construcción, elementos decorativos y detalles del edificio, con la obra del arquitecto pontanés (maestro de obras) Rodrigo García Luque.
El método del análisis comparativo para determinar la autoría de un edificio implica comparar características de una construcción en cuestión con otras obras conocidas del supuesto autor. Este proceso incluye analizar aspectos como el estilo arquitectónico, materiales utilizados, técnicas constructivas, y detalles ornamentales. Los investigadores buscan patrones, similitudes y diferencias que puedan relacionar el edificio con el trabajo conocido del arquitecto. Este enfoque es particularmente útil en casos donde no hay documentación directa que atribuya la obra a un arquitecto específico, como ocurre en el caso de la casa de la Cuesta Borrego 3, permitiendo hacer inferencias basadas en comparaciones detalladas con otras obras confirmadas del arquitecto, Rodrigo García Luque.
Al realizar el análisis comparativo para determinar la autoría del edificio, hemos considerado los siguientes aspectos clave:
- Estilo Arquitectónico: Comparar las características generales del estilo, incluyendo la forma, la proporción, y los elementos decorativos.
- Materiales y Técnicas Constructivas: Evaluar los materiales utilizados y las técnicas de construcción, que pueden ser distintivos del trabajo de un arquitecto.
- Diseño y Distribución Espacial: Analizar la planificación del espacio, la disposición de las habitaciones, y el flujo general del edificio.
- Elementos Ornamentales y Decorativos: Observar los detalles decorativos, como molduras, relieves, y otros elementos ornamentales.
- Innovaciones o Características Únicas: Identificar cualquier aspecto innovador o característico que pueda vincularse con el estilo personal del arquitecto.
- Contexto Histórico y Geográfico: Considerar el contexto histórico y la ubicación geográfica del edificio, comparándolo con otras obras conocidas del mismo período y región.
Como hemos podido demostrar D. Antonio Campos (promotor de la casa) y D. Rodrigo García (conocido arquitecto), compartieron la vida social, cultural y económica del Puente Genil de finales del siglo XIX y principios del XX. Un gran empresario y el arquitecto de moda en toda la comarca, quien diseñó los mejores edificios de la época para la burguesía local, conviviendo juntos y trabajando por el avance y el desarrollo de Puente Genil.
¿Tendría D. Antonio que buscar arquitecto fuera de Puente Genil para su nueva casa?
Las evidencias nos dicen que no.
PUEDEN DESCARGAR EL ESTUDIO COMPLETO AQUÍ: https://gomezdetejada.es/investigacion/estudio-autoria-edificio-cuesta-borrego-3-restaurante-alma/
Un edificio inspirado en un edificio famoso, que repite historicismos propios de la época aportando la creatividad del autor, como ya había hecho nuestro maestro de obras (arquitecto) previamente en la Casa ALM (Casino Liceo) o La Aurora, ambos de 1897.
Una casa que repite las técnicas edificatorias, sistemas constructivos y elementos decorativos que Rodrigo García Luque venía usando en todos sus edificios de Puente Genil. Los detalles en ventanas de madera, barandillas de forja, pilares de hierro fundido, arcos de herradura festoneados, diseño de los maineles, uso de ajimeces, geometrías decorativas en molduras y canecillos… se convierten en una suma de coincidencias que se repiten en todos y cada uno de los edificios diseñados por García Luque.
¿Grandes coincidencias? Gómez de Tejada entiende que NO. Tras el estudio del contexto histórico, económico, social y cultural de la época; y el análisis de los sistemas constructivos y los elementos decorativos tanto de la casa como de la obra de Rodrigo García Luque Francisco atribuye, sin temor a equivocarse, la autoría de la casa al gran maestro de obras (arquitecto) pontanés de finales del XIX y principios del XX.