El impacto de la crisis sanitaria se ha comenzado a notar en todos los ámbitos y muy especialmente en el deporte de élite. Así lo están poniendo de manifiesto los clubes que integran la Liga Asobal, categoría en la que milita el Ángel Ximénez-AVIA, que siguen a la espera de que la Comisión Delegada de la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM) ratifique el anuncio de la finalización de la competición realizado el pasado viernes por la Junta Directiva del órgano federativo.
Con la previsible ampliación de la categoría a 18 clubes y las dudas sobre la clasificación final de la liga, algo que afectaría implícitamente al equipo pontanés a efectos de eludir una ronda de Copa del Rey (si se toma la clasificación del final de la primera vuelta sería décimo, pero si se toma la de la última jornada disputada sería octavo y, por tanto, entraría en liza en la tercera ronda copera con eliminatoria ya a doble partido), en estos días se está hablando mucho del formato de competición de cara la próxima temporada.
Una de las propuestas que se ha lanzado pasaría porque los 18 equipos se dividieran en dos grupos de nueve, que disputarían una primera fase. Los cuatro mejores lucharían por el título, mientras que el resto pelearía por evitar un descenso que esta vez estaría más caro que nunca, ya que bajarían cuatro equipos para compensar de esta forma la estructura de la liga en la campaña siguiente 2021/22 volviendo a los 16 actuales. Tal planteamiento ni gusta ni convence a la mayoría de los clubes de Asobal, que no son partidarios de introducir modificaciones al sistema actual de liga a doble vuelta. Y es que como recordó hace unos días el presidente de Asobal, Adolfo Aragonés, cualquier modificación en este sentido debe ser consensuada por Asobal y RFEBM antes de llevarla a la Asamblea General, lo que en el contexto actual no parece demasiado probable. Además, y para echar más leña al fuego de la discordia, esta eventual propuesta contemplaría la disputa de una promoción entre el quinto clasificado por la cola de la máxima categoría con el tercer clasificado de una remodelada División de Honor Plata, circunstancia que supone una fricción total y absoluta entre ambas partes.
Con ese panorama por delante, a falta de que se clarifique la estructura de la nueva liga a 18, y con 15 clubes de los 16 de la categoría con ERTE aplicados a sus plantillas, en los despachos de clubes como el Ángel Ximénez-AVIA se trabaja a pleno rendimiento para cuadrar las cuentas, sobre todo porque la única opción para mantener la viabilidad económica durante los próximos meses pasa por establecer presupuestos de contingencia, claramente a la baja, tratando de mantener el máximo número de ingresos posibles en forma de respaldo por parte de instituciones y patrocinadores. Asimismo, otro aspecto que preocupa es el relativo a los ingresos por la venta de abonos, que podrían bajar de manera importante si se lleva a la práctica la medida de disputar partidos a puerta cerrada durante los primeros meses de competición, algo que, evidentemente está por ver.
Con toda esa tela que cortar todavía, en el Ángel Ximénez no han descuidado la parcela deportiva, han sido previsores, y llevan la planificación deportiva bastante avanzada. Con Paco Bustos y Miguel Ángel Moriana con un año más de contrato para seguir al frente del equipo en el banquillo, también hay jugadores con vínculo contractual en vigor para los próximos meses, como son los casos del central Juan Castro y del pivote Javi García. Del mismo modo, desde hace unos meses está renovado el extremo Xavi Tua, mientras que jugadores jóvenes como David Estepa, que han realizado una buena campaña, podrían estar entre los que continúan. Además, el año que viene habrá nuevas caras en la plantilla, como la del joven lateral serbio Mihajlo Mitic, de 23 años, un primera línea zurdo procedente del Cangas de Morrazo, que ya ha anunciado que no seguirá en el club pontevedrés y cuyo fichaje por el equipo de Puente Genil se ha dado por hecho en los medios de comunicación gallegos.
