El Pleno ha aprobado por unanimidad una moción presentada por Izquierda Unida, para la aprobación de medidas de acción positiva que contribuyan a equilibrar la desigualdad existente en Puente Genil en el nombramiento de calles y edificaciones. La propuesta, defendida por la concejala Virginia Bedmar, y enmendada por el portavoz del PSOE, José Antonio Gómez, contempla varios puntos de acuerdo, entre ellos que desde la delegación municipal de Igualdad se coordine la redacción de un listado de mujeres, tanto locales como nacionales e internacionales, que merezcan sea reconocida su labor y valorada dando su nombre a nuestras calles y edificios públicos; que una representante de la delegación de Igualdad forme parte de la comisión sobre los acuerdos de pleno relativos a la toponimia de las calles aprobada el pasado mes; y que la perspectiva de género se incorpore a la ordenanza y al reglamento que se aprobó en la ordenanza sobre toponimia y que se tenga en cuenta la menor presencia de mujeres en el callejero y que se tomen medidas para revertir la situación”.

En su intervención, Bedmar, dijo que se puede constatar “la desigualdad, la falta de visibilidad de las mujeres en todos los lugares y también en los nombres cotidianos con los que nombramos nuestras calles, constatando así, la ausencia de reconocimiento público del conocimiento generado por las mujeres, la dificultad del acceso al poder y la falta de conciliación y corresponsabilidad ya que tradicionalmente a las mujeres se les ha relegado al ámbito privado y doméstico”. “Por iniciativa del Movimiento Feminista de Puente Genil, que ha llevado a cabo un estudio sobre los nombres de las calles de nuestro municipio, se constata que la diferencia entre las calles que llevan nombres masculinos y las que llevan nombres femeninos sigue siendo enorme. Los datos son los siguientes:  108 calles con nombre de hombre; 16 calles con nombre de mujer;  17 calles con nombre de vírgenes;  16 calles con nombre de santos; 14 calles dedicadas a profesiones masculinas y 2 calles dedicadas a profesiones femeninas”.  “Estos datos muestran como solo un 13% de nuestras calles tienen nombre de mujer. A esto le podemos sumar la diferencia en la cantidad de bustos y esculturas dedicadas a hombres y las pocas dedicadas a mujeres, y lo más alarmante, es que esta diferencia se mantendrá si no se toman medidas de acción positiva tendentes a equilibrar y a visualizar a las mujeres, dado que los nombres que se han dado a las nuevas calles de nuestra ciudad gran mayoría han sido masculinos, con lo que se está contribuyendo a que esta diferencia se acreciente”.