Un café hablando sin tapujos contra las adicciones, por un lado con Óscar, terapeuta de Forum Terapéutico Pablo Sosa, de Sevilla y adicto recuperado, y por otro lado con Óscar Trigos, que nos cuenta su caso como familiar de alguien que ha caído en una adicción.

Este es sin duda el café más agridulce que hemos tenido hasta ahora, con una parte realmente dura a poco que logremos empatizar con el caso, y por otro lado con una luz de esperanza porque de ahí se puede salir, no sin esfuerzo, pero se puede.

Óscar nos ayuda a poner el foco sobre las casas de apuestas que han «florecido» en los últimos años en Puente Genil y que han sido el motivo de la caída en la adicción de su hermano. Somos un 30.000 habitantes y hay demasiadas.  

A los sitios más clásicos donde, de un modo u otro, el trato es más humano y cercano, con lo que algo aún se puede hacer con quien ya está en el carril de descenso, se han sumado varias franquicias de salones de juego, que hacen un total de 7

Igual 7 salones de juego para 30.000 habitantes no suena demasiado, pero dicho de otro modo es uno por cada 4.200 habitantes aprox. En Madrid tienen alrededor de uno por cada 8.500, en Córdoba, uno por cada 9.200… y en Huelva, la provincia andaluza con más salas de juego por habitante, hay una por cada 4.300… Podemos «sacar pecho» de estar a la cabeza

En Puente Genil tenemos 7 salones de juego: uno por cada 4200 habitantes

Te dejo este interesante artículo de Cordópolis https://cordopolis.es/2019/11/18/cordoba-tiene-un-salon-de-juegos-por-cada-9-221-habitantes/

El «otro Óscar», como terapeuta y adicto rehabilitado, nos cuenta no solo su día a día intentando ayuda a otros que padecen esta enfermedad llamada adicción, sino su propia historia personal, que al menos a mí, me hace reflexionar y mucho.

Nos cuenta que las adicciones van de la mano unas con otras, casas de juego, alcohol, otras sustancias, conductas… y no son cosas de «grupos marginales», de personas con un enorme problema, de viciosos, de otra gente que no son «de los nuestros»… Las adicciones ocurren a nuestro alrededor, en gente como tú y como yo, con una vida y una familia como la tuya y como la mía, aunque salvo en contadas ocasiones, no las veamos.

Desde aquí, públicamente mi enorme agradecimiento a Óscar Trigos por atreverse a contar su historia tratando de hacer que sirva para sacar a debate este tema.